Se han fijado que cuando algún producto te ofrece limpieza, desinfección o algo similar se cubre con ese 0.01% de ineficiencia que bien podría ser hasta fatal? ¿No estaré exagerando, quizás?
Por qué no mejor decir: “Advertencia, este producto no hace bien lo que se supone es su única misión”
Yo creo que esa declaración del 99.9% es inherente a cualquier servicio recibido, pero, en algunos no es mejor mencionarlo.
Qué pensaría mi esposa si en el momento de dar el “sí” le digo además. “Prometo serte fiel sólo en un 99,9%”. Es decir, mejor seamos directos y digamos que no estamos seguros del amor que sentimos por el otro.
Evitemos la demanda millonaria, el tener que disculparnos públicamente o humillarnos por no haber dicho que no somos eficientes, perfectos de una vez.
Para variar, Francisco divagando. Finalmente nada se hace 100% bien, quizás este post tenga un 99,9% de desgano y utilicé sólo el 0,01% de ganas en escribirlo y finalizarlo.
Finalmente, ¿quién dijo que 100% es una cifra total?
Fjmedina's Blog 
La culpa de este flagelo que hace culto al ‘sistema decimal’ como sinónimo de ‘perfección’ se reparte en tres:
Por un lado, las Matemáticas.
Siempre intentando convencernos de que dos más dos da cuatro.
De que el total es el 100%.
De que el 100% es un 10.
Por otro lado, la Iglesia.
Asegurando que Dios es TODO.
Debajo nosotros, los simples mortales.
Y en un tercer lugar, la creencia popular, que da valor agregado al producto bruto.
10 es Dios.
10 es Maradona.
Dios es Maradona.
Y así vamos por la vida, justificando con ímpetu postulados, leyes y creencias que alguien escribió ‘por ahí’, en lugar de recurrir a la comprobación empírica que, naturalmente, nos da 101% de paja.